İhsan nació con discapacidades físicas. Tiene que vivir dependiente de su madre para esta discapacidad y es un joven que se siente cada vez más ofendido por esta vida en la que está atrapado. Hay sueños que nunca piensa que serán verdaderos; se ve afectado por el peso de la idea de que él es el comerciante de sueños y una carga para su madre. Julio es un escultor que dejó la casa de su padre en línea con sus ideales y luchó por mantenerse en pie. Para poder pasar, dibuja novelas infantiles y tiene una relación que él cree que es buena. Sin embargo, repentinamente abandonada por su amante y luego perdió su trabajo, le molestó aún más la vida. Los caminos de julio e Ihsan se entrecruzan con los sueños en un período tan oscuro de sus vidas, y esta coincidencia asegura que ambos renacen.