
Uzun Hikâye recorre la vida de Ali (Kenan Imirzalioglu). Tras ser huérfano a una edad temprana en Bulgaria, Ali es cuidado por su abuelo, Süleyman. El abuelo, en busca de un futuro mejor, toma la decisión de emigrar él y su nieto a Turquía.
Una vez entrado en la adolescencia, Ali conoce a Münire (Tugçe Kazaz) y se enamora de ella. Debido a que la familia de ella no acepta la relación, Ali y Münire se fugan. Desde entonces, la pareja cambia de lugar de residencia siendo las estaciones de tren un elemento recurrente en sus vidas. Ellos tienen un hijo, Mustafa (Mustafa Alabora) que busca hacerse un hueco en este mundo.